Significado, Concepto o Definición de la letra “Ñ”
La letra Ñ ocupa la decimoquinta posición en el alfabeto español. Es una letra de uso exclusivo del español y se denomina eñe. Esta letra no es considerada originalmente como parte del alfabeto latino ni del alfabeto griego, latino o árabe que se ha heredado en el alfabeto del español actual.
El origen de la letra Ñ se atribuye a una derivación de la consonante N y se diferencia de ella por un símbolo que se ubica en la parte superior denominado virgulilla cuya forma simbólicamente se asemeja a una serpiente.
Antonio de Nebrija, catedrático de la lengua española consideraba que esta letra es una especie de creación nacida en los monasterios en manos de los copistas medievales quienes usaban la virgulilla en el siglo XII para indicar que una letra estaba repetida.
Originalmente, la “´ñ” era un símbolo empleado en los textos escritos; por ello era frecuente encontrar la “ñ” en las copias para representar la presencia de una “n” repetida en un texto escrito repetido, es decir, ñ = nn; este ejemplo representa el caso del dígrafo “nn”. Con el paso del tiempo este símbolo se convirtió en letra del alfabeto.
La virgulilla acompaña, en español, exclusivamente a la letra Ñ; pero en otras áreas del conocimiento puede simbolizar distintas cosas; por ejemplo, en lógica simboliza la negación; en Estadística representa un valor variable o Matemática valor o cantidad aproximada. En las redes sociales “ñ.ñ” significa “feliz”.
Desde el punto de vista fonético la Ñ tiene realización palatal nasal. Esto quiere decir que el punto de articulación implica el contacto entre la parte media o trasera de la lengua y el paladar óseo con la consecuente expulsión del aire por la nariz.
Curiosamente muchas personas superponen a la virgulilla una diéresis (¨) cuando escribe la letra Ñ; es importante destacar que esto es un error ortográfico puesto que en español ninguna letra tiene doble acento o doble símbolo gráfico; el símbolo de uso más frecuente es la tilde (´) que sólo acompaña algunas vocales; la diéresis sólo acompaña a la “u” gráficamente para indicar al lector que debe ser pronunciada.